Pregoneros infantiles

Pregoneros de la cantera: Leo Rodríguez y Dania Quintero


El Carnaval de Málaga vive este año un momento histórico. Por primera vez, el pregón de la cantera correrá a cargo de dos niños que han crecido en los grupos de animación. Otro de los elementos importantes de nuestra fiesta. Ellos son Leo y Dania, dos jóvenes talentos que representan la pasión, el ritmo y la creatividad que aseguran el futuro del carnaval malagueño.

Leo, el compás hecho niño

Con solo 11 años, Leo es ya un referente entre los más pequeños. Su relación con el carnaval comenzó siendo apenas un bebé: acudió a ver desfilar a sus primas y se enamoró de la fiesta. Desde que cumplió un año no ha faltado a ningún desfile, siempre junto al grupo de animación “Sonrisas de Plata”, que lo vio crecer entre serpentinas, música y risas.

El último año dio un paso más y se unió a la murga infantil “Los que vienen de Antequera, de otra era”, donde además de cantar, marca el compás con su inseparable caja. Hoy, como pregonero de la cantera, Leo representa el ritmo y la entrega de quienes viven el carnaval desde dentro.

Dania, la estirpe de las diosas

Con apenas 10 años, Dania brilla por su talento para el baile y su creatividad en las coreografías que llenan de vida cada desfile. Su vínculo con el carnaval es un legado familiar: su abuela, su madre y sus tías han sido diosas del Carnaval de Málaga, y desde que nació le transmitieron la alegría, el color y el brillo de la fiesta.

Su primera experiencia llegó a los tres meses de vida, cuando salió vestida de muñeca gracias al diseño de su abuela, también en “Sonrisas de Plata”. Desde entonces no ha faltado a un solo carnaval, creciendo entre disfraces, música y tradición.

Un pregón que marca un antes y un después

Leo y Dania encarnan la fuerza de la cantera y la diversidad del carnaval: él, con su caja y su voz; ella, con su danza y su creatividad. Juntos protagonizarán un pregón que supone un antes y un después, porque recuerda que el carnaval no solo se canta: también se baila, se anima y se sueña desde la infancia.